En este nuevo artículo, concluiremos la serie hablando de tres parámetros enfocados a conocer la naturaleza y la calidad del tráfico recibido.
En artículos anteriores, pudimos comprender la importancia de mantener al día nuestro conocimiento sobre el tráfico que genera nuestra web. Aprendimos también a interpretar algunos de los valores más esenciales que nos ayudan a cuantificar ese tráfico. En este nuevo artículo, concluiremos la serie hablando de tres parámetros enfocados a conocer la naturaleza y la calidad del tráfico recibido. Comenzamos.
Porcentaje de rebote.
En términos analíticos, entendemos por “rebote” la acción de un usuario que llega a nuestra web pero no pasa de la primera página. Es decir, nada más llegar y con unos pocos segundos de retardo, sale de ella sin hacer clic en ninguno de los enlaces o secciones de la web. Este hecho es mucho más frecuente de lo que se cree y no tiene porqué representar un problema en si mismo. Hay páginas que “arrastran” hasta un 50 o incluso un 60% de rebotes y son rentables. Hay que mencionar que buena parte de esos rebotes pueden tener procedencia no humana, es decir, pueden ser spiders o robots de búsqueda. En cualquier caso lo ideal es intentar reducirlo al máximo y para ello hay que trabajar duro en hacer sitios web interesantes, llevar nuestras mejores bazas a la home y hacerlos amigables para todo tipo de dispositivos.
Un porcentaje de rebote excesivamente alto también puede ser indicativo de que no estamos gestionando bien nuestras campañas de publicidad en la modalidad de pago por clic, de las que hablaremos en el futuro.
Ubicación geográfica.
Un buen sistema de analítica, debe informar muy bien desde que ubicaciones geográficas acceden los usuarios a nuestra página. A nivel de continentes, países, provincias (o estados) e incluso localidades. Estos sistemas suelen ser bastante precisos y pueden dar una información extremadamente valiosa para saber si estamos generando interés allí donde nos interesa hacerlo. Si tenemos un negocio local, por ejemplo una tienda física de alimentación, estaremos muy atentos a generar tráfico en un radio geográfico cercano. Si somos exportadores y tenemos una serie de mercados objetivo en países externos, este dato será una referencia vital, no solo para confirmar que tenemos visibilidad donde la necesitamos sino también para saber si estamos gestionando adecuadamente nuestro SEO y nuestras campañas SEM (Search Engine Marketing).
Palabras clave principales.
Dentro del área de adquisición, que identifica el origen del tráfico recibido, merece especial atención el apartado de palabras clave principales. Este representa aquellas palabras que los usuarios han introducido en los buscadores para llegar hasta nuestra web. Es sin duda una de las la formas más directas e inequívocas de conocer sus preferencias. Será siempre importante comprobar que esos términos coinciden con los que tenemos en mente al planificar el SEO y para poder tomar decisiones objetivas al respecto.
A veces, a partir de las búsquedas que realizan los usuarios, podemos incluso detectar nuevos intereses o nichos de mercado que podemos valorar si incorporamos a nuestra oferta, ganando quizá con ello otra ventaja competitiva.
Este es un ejemplo más de las múltiples ventajas que se derivan de un estudio detallado y constante del tráfico de nuestra web.